Reunión familiar en Saint-Cast-le-Guildo
Porque los momentos en familia son preciosos, todo el mundo está preparado para pasar un día magnífico en Saint-Cast-le-Guildo, la encantadora península de la Costa Esmeralda.
Mañana: caminata con vista a la punta de Saint-Cast
Una caminata ideal de 2 horas (7 km) para descubrir el balneario. Desde Grande Plage, se llega al puerto deportivo por el enlace peatonal y luego se disfruta de una magnífica vista de Fort La Latte, las pequeñas calas secretas y la bahía de La Fresnaye desde el GR34. El regreso es por el barrio de Isle y sus bonitas casas típicas. ¿Y por qué no terminar la mañana con un breve chapuzón en el mar seguido de un almuerzo en la terraza frente al océano azul?
Tarde: actividades para todos los gustos
¡La estación balnearia de Saint-Cast-le-Guildo ofrece una amplia variedad de actividades para deleitar a pequeños y mayores, familias y amigos! ¡Nos inspiran las sugerencias de actividades y sobre todo nos divertimos!
Para admirar la Costa Esmeralda desde el mar, reserva una lechuza viaje en barco. Varias rutas son posibles: a Cap Fréhel y Fort La Latte, a la isla de Ebihens oa Dinard y Saint-Malo.
O optamos por una actividad más deportiva y desafiamos a los padres: curso de acrobacias en los árboles, paseos en bicicleta, iniciación al golf de 18 hoyos... y actividades acuáticas como remo gigante, piragüismo o vela tradicional.
Y queremos más: Paseo en segway por el boulevard de la mer, minigolf, nadar, caminar en el agua o montar a caballo...
¡Seguimos la guía para una salida 100% Naturaleza! Porque amamos la naturaleza y la respetamos, aprendemos a pie sobre la pesca responsable, descubrimos la cultura de las ostras y los mejillones o incluso la historia del balneario.
En familia, optamos por la búsqueda del tesoro, "El tesoro de Alfredo". Con nuestra mochila de investigador, nuestros mapas y nuestras hojas de rompecabezas, ¡depende de nosotros encontrar el código del tesoro!
Como gastrónomo que se precie, no nos perdemos una pausa gourmet, en la terraza o en los salones de té, mientras disfrutamos de un delicioso helado artesanal. ¡Estos pequeños y sencillos placeres seguramente harán las delicias de toda la familia!
Y terminamos nuestro día paseando por las calles del Quartier des Mielles, para encontrar souvenirs elaborados en Saint-Cast, degustar especialidades locales como ostras o veneno venenoso, luego disfrute de la puesta de sol mientras toma una copa en la terraza y empápese del ambiente castine.